Del 12 al 16 de septiembre se desarrollará en la ciudad de Arequipa, la 30 Convención Minera conocida como PERUMIN, este evento es uno de los foros empresariales más importantes a nivel mundial, que se ha consolidado como el de mayor asistencia, expectativa y organización, debido al desarrollo protagónico del sector minero en nuestro país y por la cantidad de participantes nacionales  e internacionales que convoca. En el escenario de este evento se desarrollarán: EXTEMIN donde empresas nacionales e internacionales, pueden intercambiar ideas y propiciar oportunidades de negocios, el Encuentro Empresarial, el Encuentro de Operadores, el Encuentro Logístico, y el Top Mining in Perú.

Seguramente en PERUMIN estarán participando las principales empresas mineras que operan en Arequipa, entre las que se encuentran la Sociedad Minera Cerro Verde, Minas Bateas, Titán del Perú, Arirahua, Yanaquihua, Buenaventura, Arcata, Century Mining Perú entre otras.

Pero en Arequipa existe otra minería, principalmente dedicada a la explotación del oro, la que opera en las provincias de Condesuyos y Caraveli, esa minería se ubica en las zonas Chaparra, Quicacha, Cahuacho, Huanuhuanu, Tocota, Relave, Atiquipa, Secocha, Yanaquihua, Andaray etc. Esta minería se ubica en zonas concesionadas a terceros, en otros casos lo hacen en zonas libres, es decir no concesionadas. Es en Chala y Nazca donde se procesa el mineral.

Por razones trabajo en días pasados estuve recorriendo parte de las provincias de Condesuyos y Caraveli, y puede verificar la situación de la otra minería, donde la gran mayoría tiene condición de “minería informal” es decir ilegal, éste tipo de minería está actuando sin control o fiscalización, no paga impuestos (canon, regalías, derecho de vigencia), explota a los trabajadores adultos y a los niños, provoca conflictos y enfrentamientos entre mineros y agricultores, origina delincuencia, alcoholismo, prostitución, violencia e inseguridad, utiliza sin control explosivos peligros, genera graves impactos ambientales por el empleo de sustancias muy toxicas como el mercurio, el cianuro, arsénico, soda caustica y el carbón activado, los desechos de estas sustancias son arrojadas a los ríos y suelos, produciendo contaminación  del medio ambiente y efectos en la salud de las personas. Igualmente he podido verificar “in situ” que la mayoría de mineros informales poseen camionetas 4 x 4, motocicletas deportivas, celulares y televisión satelital, equipos electrónicos de última generación entre otras comodidades.

Según cálculos de la Gerencia Regional de Energía y Minas del Gobierno Regional de Arequipa, se calcula que en Arequipa existen cerca de 15 mil mineros informales que operan principalmente en Caraveli, Condesuyos y Camaná. Según puede averiguar cada minero informal obtiene utilidades entre mil a dos mil dólares en forma mensual.

Lo paradójico es que la minería formal es la que procesa y compra el oro que proviene de la minería informal, así tenemos que estas empresas formales no verifican la procedencia del mineral que procesan y/o compran, quedando de esa forma legalizada la comercialización del oro. Igualmente estas mismas empresas formales venden a los informales los explosivos y los productos químicos que necesitan para su ilegal actividad.

En relación al tema de la protección del medio ambiente y el cuidado de la salud ambiental, el tema critico lo constituye el uso indiscriminado del mercurio y el cianuro, lo que queda de la molienda del material extraído se arroja directamente al suelo y los ríos cercanos, contaminando las aguas superficiales y subterráneas. Sobre los efectos en la salud de los mineros informales, estos al estar en contacto directo con el mercurio y/o cianuro están perjudicando seriamente su salud, pero a ellos no les importa frente a las ganancias que obtendrán. La mayoría de mineros informales que actúan en Arequipa, son personas provenientes de Puno y Cusco.

Hay que recordar que de acuerdo a las leyes vigentes la pequeña minería y la minería artesanal, son de competencias de los Gobiernos Regionales su control y fiscalización. En el caso de Arequipa, pese a los esfuerzos que se viene haciendo para su formalización, los resultados son mínimos, porque cada día son más personas que se dedican a la minería informal, un atractivo lo constituyen los altos precios del oro en el mercado mundial. Los mineros informales seguramente no participaran en PERUMIN, pero son una realidad, que existe y actúa en Arequipa.